El popular locutor y conductor de televisión debuta como escritor con Así lo veo, un libro que desde una perspectiva muy particular invita a recordar muchos de los acontecimientos vividos en el país durante la última década
Desde que llegó al mundo un 8 de abril de 1967, Luis Chataing no ha pasado desapercibido: con un telegrama dirigido a su abuelo paterno, dando la noticia de su nacimiento, hizo lo que su padre define como “su primer acto comunicacional”. Desde entonces familiares, amigos y los seguidores de sus distintas etapas profesionales han sido testigos de un talento excepcional.
Poseedor de una creatividad que no conoce límites y pensamientos que logran convertirse en ideas y éxitos a paso veloz, este hombre de medios salta al ruedo literario para presentar su primer trabajo como autor titulado Así lo veo.
Respaldado por Ediciones B, Así lo veo, recoge cientos de anécdotas y temarios surgidos en una suerte de bitácora personal que el meticuloso Luis ha registrado durante años.
Con un recorrido de chistes, cotidianidad y frases reflexivas en torno a la escasez de alimentos, el racionamiento de agua, las marchas, la reforma constitucional, las particulares “sesiones” de los diputados en la Asamblea Nacional, súper héroes, también villanos, fenómenos climáticos, noticias de última hora y una larga lista de ítems, Luis nos invita a hacer catarsis y apelar al humor como la única herramienta para intentar sobrevivir al acontecer nacional e internacional.
“Loco” para algunos, “irreverente” para otros, “el hombre de la radio y la TV” o “el inseparable amigo de Erika de La Vega” -y pare usted de contar-, pero siempre centro de atención, Chataing nos revela a través de sus páginas una nueva faceta en su carrera: la de un escritor que a través del humor y el más fino sarcasmo nos invita a reflexionar en torno al país y al mundo que nos rodea.
“Este libro nos pasea por el pasado reciente a través del humor. Espero que el lector se divierta, se entretenga y a la vez haga un ejercicio de memoria y reflexión. Con este libro me siento un poco el personaje de Roberto Begnini en la película La vida es bella", intento entretener al lector utilizando ingredientes de una realidad que nos rodea y tal vez no es tan graciosa”, dice.
Dueño de un estilo que marcó un antes y un después en la historia de la televisión venezolana con el programa “Ni tan tarde”, Chataing irrumpe en el mundo literario acompañado nada más y nada menos que por su padre, quien siguiendo aquel dicho que reza “de tal palo, tal astilla” también plasma su perspectiva sobre las noticias, hechos y personajes de nuestro casi insólito país, con simpáticas ilustraciones a lo largo del libro que ya se encuentra a la venta en las principales librerías del país.
Fuente: Blanca Santos
Desde que llegó al mundo un 8 de abril de 1967, Luis Chataing no ha pasado desapercibido: con un telegrama dirigido a su abuelo paterno, dando la noticia de su nacimiento, hizo lo que su padre define como “su primer acto comunicacional”. Desde entonces familiares, amigos y los seguidores de sus distintas etapas profesionales han sido testigos de un talento excepcional.
Poseedor de una creatividad que no conoce límites y pensamientos que logran convertirse en ideas y éxitos a paso veloz, este hombre de medios salta al ruedo literario para presentar su primer trabajo como autor titulado Así lo veo.
Respaldado por Ediciones B, Así lo veo, recoge cientos de anécdotas y temarios surgidos en una suerte de bitácora personal que el meticuloso Luis ha registrado durante años.
Con un recorrido de chistes, cotidianidad y frases reflexivas en torno a la escasez de alimentos, el racionamiento de agua, las marchas, la reforma constitucional, las particulares “sesiones” de los diputados en la Asamblea Nacional, súper héroes, también villanos, fenómenos climáticos, noticias de última hora y una larga lista de ítems, Luis nos invita a hacer catarsis y apelar al humor como la única herramienta para intentar sobrevivir al acontecer nacional e internacional.
“Loco” para algunos, “irreverente” para otros, “el hombre de la radio y la TV” o “el inseparable amigo de Erika de La Vega” -y pare usted de contar-, pero siempre centro de atención, Chataing nos revela a través de sus páginas una nueva faceta en su carrera: la de un escritor que a través del humor y el más fino sarcasmo nos invita a reflexionar en torno al país y al mundo que nos rodea.
“Este libro nos pasea por el pasado reciente a través del humor. Espero que el lector se divierta, se entretenga y a la vez haga un ejercicio de memoria y reflexión. Con este libro me siento un poco el personaje de Roberto Begnini en la película La vida es bella", intento entretener al lector utilizando ingredientes de una realidad que nos rodea y tal vez no es tan graciosa”, dice.
Dueño de un estilo que marcó un antes y un después en la historia de la televisión venezolana con el programa “Ni tan tarde”, Chataing irrumpe en el mundo literario acompañado nada más y nada menos que por su padre, quien siguiendo aquel dicho que reza “de tal palo, tal astilla” también plasma su perspectiva sobre las noticias, hechos y personajes de nuestro casi insólito país, con simpáticas ilustraciones a lo largo del libro que ya se encuentra a la venta en las principales librerías del país.
Fuente: Blanca Santos
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